Consejos de Iluminación Para Mejorar Tus Fotografías (Que No Te Puedes Perder)
Todos somos o hemos sido novatos en esto de la fotografía, todos hemos empezado obsesionados en escoger la mejor cámara que nuestro bolsillo puede pagar por mucho que nos digan que no es lo más importante. Todos hemos empezado trasteando en automático sin hacerle demasiado caso a nuestro manual de instrucciones, esperando el don, el milagro que nos haga, del día a la mañana, dignos de recibir el título de fotógrafos. Porque los inicios siempre son ilusión y pasión y algo de engaño también. Porque el gran reto de la fotografía, el gran ingrediente, aquello que diferencia una imagen mediocre de una fascinante no es otra cosa que la iluminación. La iluminación es el gran reto al que nos enfrentamos como fotógrafos, porque la luz lo es todo en una fotografía, y a la vez uno de los aspectos más olvidados y temidos
Pero no temas, si estás aquí, es que vas
por buen camino, porque la fotografía no es un don, bueno puede que sea
un don pero es uno que se aprende, y tú vas camino de conseguirlo
Escoge el tipo de medición adecuado para cada ocasión
Si bien en algunas ocasiones las cosas
sucederán rápidamente ante ti y no tendrás demasiado tiempo para pensar,
lo cierto es que la mayoría de veces contarás con tiempo suficiente
para preparar los ajustes de tu cámara. La cuestión es pensar en hacerlo y convertir este hecho en parte de tu rutina fotográfica, porque es muy importante decidir antes de disparar, qué ISO, qué velocidad, qué apertura, porqué esto y no lo otro. Es en tu mente donde empieza a formarse la fotografía que más tarde se plasmará en tu sensor,
así que es muy importante pensar antes de disparar, porque es ahí donde
radica la gran diferencia y donde se consigue una buena imagen.
Uno de los aspectos que hay que pensar antes de disparar es qué tipo de medición
se adecua a la imagen que tenemos delante, es decir de dónde recogerá
el fotómetro de nuestra cámara la información y cómo la procesará para
darnos los valores de exposición.
Puntual
Es el más preciso aunque no quiere decir que sea el más adecuado para todas las ocasiones. El modo puntual mide la información en el punto exacto que nosotros le indicamos sin tener en cuenta ningún tipo de información lumínica fuera de éste. Es útil cuando queremos una medición muy precisa
en alguna parte de la escena porque es allí donde reside nuestro centro
de interés sin importarnos la información de alrededor, o cuando hay
mucha diferencia entre nuestro centro de interés y la zona que lo rodea.
Central
Este tipo de medición descarta la información de los márgenes del encuadre, centrándose en la zona central de la escena.
Ponderada al centro
Parecido al central, sólo que esta vez
no excluye la información que rodea a la zona central (aunque le da
menos peso) y sí que excluye las zonas en las que considera que se sitúa
el cielo.
Matricial (de patrón múltiple o multizona)
Mide todas las zonas de la imagen creando unos valores de exposición medios. Es probablemente el modo más utilizado de todos y el que te funcionará bien en la mayoría de las situaciones, siempre que tengas una imagen sin una exagerada diferencia entre luces y sombras (alto contraste).
Aprende a trabajar con el histograma
Seguro que te has fijado alguna vez en
un gráfico siniestro que aparece en los programas de edición y en la
pantalla de tu cámara (si es que lo tienes activado), lleno de picos y
tan poco intuitivo, ¿verdad? Pues ese antipático gráfico se llama Histograma, es muy fácil de utilizar, y va a ser tu mejor aliado a la hora de exponer tus fotografías. Aquí te explico paso a paso qué es, cómo se lee y, en definitiva, cómo puede ayudarte a conseguir mejores fotografías.
Ese gran desconocido que se va a convertir en tu mejor amigo, ya verás
Mantén la ISO baja siempre que puedas
Unos valores elevados de ISO,
si bien aumentan la sensibilidad a la luz de tu sensor (permitiéndote
trabajar como si hubiera más luz de la que realmente hay), también
repercuten en la calidad de tu imagen. Es por ello que siempre
recomendamos mantener unos valores bajos por defecto y subirla sólo cuando necesitemos una dosis extra de sensibilidad (fotografía nocturna o de interiores).
Presta atención al balance de blancos
Muchas luces que nosotros vemos blancas
son, en realidad, captadas por nuestro sensor con unos tonos cálidos
(luces de tungsteno de la mayoría de interiores) o fríos (por ejemplo
fluorescentes), es lo que conocemos como temperatura de color. Es por ello que es tan importante tener cuidado con el balance de blancos,
que es el sistema que se encarga de corregir estas desviaciones de
color hacia los tonos cálidos o fríos. La mayoría de veces un tono
automático te funcionará bien, pero si quieres asegurarte el resultado,
dispara en RAW y corrige la tonalidad en el procesado.
Experimenta con la orientación de la luz
Dependiendo de la direccionalidad de la luz una fotografía una misma imagen puede cambiar drásticamente.
Frontal
La luz frontal se sitúa delante de lo que estamos retratando. Reduce las texturas, elimina las sombras y aumenta el detalle.
Lateral
El sujeto u objeto recibe la luz lateralmente, resaltando las texturas y aumentando el volumen.
Cenital
La luz proviene de encima del sujeto
iluminándolo desde arriba. Este tipo de iluminación produce sombras
acentuadas en el rostro, especialmente bajo los ojos y nariz. Este es el
tipo de iluminación de las horas centrales del día cuando el sol está
alto en el cielo.
Nadir o contrapicada
Si en la iluminación cenital la luz
viene desde arriba, en este caso, es todo lo contrario, viene de abajo,
dando como resultado sombras poco naturales, como un mentón iluminado, o
unos pómulos y ojos oscuros.
Trasera
La luz proviene de detrás del sujeto. Este es el tipo de iluminación que necesitarás para trabajar con siluetas o contraluces.
Consejos para fotografiar con luz natural
La luz natural es el mejor estudio que hay,
y saber jugar con ella y exprimir todas sus posibilidades será tu gran
baza para mejorar tus fotografías a través de una buena iluminación.
Amaneceres y atardeceres
Las mejores horas del día para tomar fotografías al aire libre siempre son las primeras y las últimas del día. En amaneceres y atardeceres,
la luz es suave, cálida y lateral, realzando las texturas, las sombras
largas y suaves… Ideal para fotografiar paisajes y lograr retratos
maravillosos. Los momentos que preceden (en amaneceres) o que suceden
(atardeceres) a estos instantes de luz cálida, son conocidos como hora azul y también te regalarán oportunidades mágicas para fotografiar paisajes tanto urbanos como naturales.
Luz dura
Por desgracia, por muy maravillosa que
sea la luz de atardeceres y amaneceres, es una luz que dura pocos
instantes, así que, o bien optamos por contenernos todo el día sin
apretar el obturador perdiéndonos instantes irrepetibles hasta el
anochecer, o bien aprendemos algunos trucos para trabajar con luz dura, que es la mayoría del resto del día.
- Aprovecha las escenas de alto contraste para ejercitar tu creatividad
- No desaproveches la oportunidad de consguir un buen retrato:
- Bajo un árbol
- En un porche
- Bajo un paraguas o un parasol de playa
- Aprovecha los días nublados en los que las nubes actúan de difusores suavizando el contraste y las sombras.
Consejos para fotografiar con luz artificial
Cuidado con el balance de blancos
Presta especial atención al balance de
blancos, porque en interiores es posible que te encuentres ante una
escena con combinaciones de luces y por lo tanto con temperaturas de
color diferentes. Ante la duda, dispara en RAW.
Acércate a una ventana
Las ventanas y su luz lateral aderezadas
con unas cortinas claras a modo de difusor, pueden ser el mejor estudio
casero que puedas encontrar. Como siempre, el poder de la luz natural
es único.
Utiliza toda la luz disponible
Los interiores, por mucha luz que creas
tener siempre son menos luminosos de lo que piensas. Así que corre
cortinas, enciende luces, abre puertas… Toda luz es poca.
- Aprovecha para experimentar con retratos en clave alta (mucha luz y fondo blanco) y sobre todo en clave baja (fondo oscuro y luz tenue), puedes conseguir muy buenos resultados en interiores con algo de paciencia
Hazte con un flash externo
Los flashes externos no sólo te permiten modificar la potencia sino que además te permiten rotar el cabezal para rebotar la luz en techos, paredes u otras superficies permitiéndote así conseguir una luz homogénea y difusa muy fotogénica para retratos.
- Si no tuvieras cabezal rotatorio, hazte con un difusor de luz, son muy baratos y te ofrecen resultados muy buenos.
Y por último… Aprende a dominar la apertura de diafragma
La mejor forma de controlar la luz que pasa hacia tu sensor es a través de la apertura de diafragma. Abriendo el diafragma, dejarás pasar más luz y cerrando menos, afectando también directamente a la profundidad de campo
(cuanto más cerrado esté el diafragma, mayor profundidad de campo
tendrás en la imagen y cuanto más abierto, menor profundidad de campo o
zona enfocada en la imagen.
¿Qué te parece?, ¿mucha información de golpe?
No te preocupes, no es cuestión de aplicar todos los consejos a la vez.
Este artículo no se moverá de aquí para cuando puedas necesitarlo
Y si piensas que alguien más podría estar interesado o interesada en
echarle un vistazo, por favor, compártelo. Muchas gracias y hasta la
próximaFUENTE: http://www.blogdelfotografo.com/consejos-iluminacion/
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